martes, 5 de abril de 2011

Esa sensación de flotar, dentro de una burbuja, fuera de las normas.


Hace tiempo que no sentía, no sentía la magia de la música.
Esa sensación de que todo surge sin pensar. Coger la guitarra y empezar a sentir, primero un par de acordes, después algo más delicado y sin darte ni cuenta estás cantando, ¿pero el qué? pues eso, todo lo que sientes y que llevas dentro, quizás no te habías dado ni cuenta pero las palabras te salen solas, ¿para que ir a un psicólogo para que te saque tus sentimientos, si cogiendo esa guitarra puedes hablar contigo misma?

Es algo que siempre hecharé de menos, a veces me arrepiento de no haber seguido el camino de la música y haber elegido el lógico, el que te dicta la sociedad, porque es algo normal y tienes un futuro mucho más seguro.

Me arrepiento de haber pensado como se supone que debemos de hacerlo.

Idiota.

O no?

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